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lunes, 2 de septiembre de 2013

A una operación, nunca braguitas de algodón.

Desde hace más de dos meses, se me había formado en el párpado derecho, una especie de bultito que en realidad no era lo que dolía, si no más bien que no me permitía maquillarme los ojos con mi nuevo eye liner de Dior.

El nombre del bultito, según el Doctor Guimera era "Chalacio", se me había cerrado un porito por donde salen las lágrimas y eso provocó una infección.
Yo que ya saben lo dramática y telenovera que soy, les contaba a todo el mundo que se me había secado el lagrimal de tanto llorar, como si de la Jurado se tratase.

El caso es que tenía dos opciones, dejarlo y que se fuera con el tiempo o seguir aguantando al cajero del Eroski que cada vez que me veía me llamaba "OJOPOLLO". (Este pobre no sabe que no renovará contrato)

Así pues decidí operarme....
Era según el Doctor, algo super sencillo, nada doloroso.
Yo le supliqué que me durmieran entera, que yo no estaba por una anestesia local y él muerto de la risa, me mintió.

Allí estaban todos, mi madre, mi padre, mi hermana que se había cambiado el turno, en fin ni los Montoya se quieren tanto como nosotros.
Doscientas llamadas de mis compañeras de la tele y amigos, todos para darme ánimos pues he llegado a la reflexión y esto no lo aprendí ni de Bucay ni de Cohello que debe ser que cuando una tiene el alma liberada de angustias, una no aguanta ni un pinchazo de aguja.

El caso es que había junto a mí una rubia espectacular de unos cuarenta y tantos años, con un cuerpazo y una cara que todo el mundo cuando entraba en la sala no podía evitar mirar lo atractiva que era, yo hasta le dije que era preciosa, a ella le ocurría lo mismo que a mí pero en el otro ojo, es decir podíamos entrar de la mano juntas, lo que debo decir que no fué así porque todo lo que tenía de guapa, tenía de borde y estúpida.

Cuando nos llamaron a las dos para la citada intervención, nos pasaron a una habitación, donde teníamos que desnudarnos para ponernos una bata que no llevaba botones, sólo se ataba por unos lazos traseros donde se podía ver perfectamente la ropa interior, a mí que mi madre desde muy pequeña me ha inculcado que a la calle siempre hay que ir bien limpita por si pasa un accidente, llevaba una ropa interior perfecta, es decir mi super conjunto de la PERLA comprado of course en rebajas de color negro y aunque la ocasión era terrorífica yo siempre siguiendo los sabios consejos de mi amada madre, no pude evitar mirar a mi compañera de ojo cuando pasó delante de mí, ver como iba ella, tal vez sea por mi profesión o tal vez por querer ver a doña CUERPO.... casi me da un infarto cuando ví las bragas tan espantosas que llevaba Doña Vulgaria, eran tan grandes o es que probablemente ya no tenían ni elástico y lo peor de todo, de un color blanco roto llegando al mostaza, todo su glamour tirado por unas bragas.
A la entrada de la sala de operaciones, nos tumbaron a cada una en una camilla y cuál fué mi sorpresa que todo el equipo, desde celadores, enfermeras y hasta la limpìadora, no sé si por mi estado de nervios o por mi divino conjunto, todos me dieron la manita, me trataron con una dulzura como si tuviera diez años y así consiguieron que aunque me dolió más que el parto de Alvarito, yo estuviera encantada, sin embargo a mi compañera no le hicieron ni caso y salió con el ojo más hinchado que yo, eso sí ella llevaba unas gafas Ray Ban a la salida y yo no.

El consejo de hoy es que la imagen tiene más importancia de la que nosotros podemos imaginar y hemos de cuidar muy bien todo detalle porque nunca sabemos donde podemos acabar.
VIVA MI MADRE.

Estoy perfecta, ya me puedo maquillar como la  Vicky Martín Berrocal y cuando hoy fuí al Erosky mi super gracioso cajero al preguntarme donde estaba el ojo pollo no quieran saber lo que le dije...


5 comentarios:

  1. Divina siempre mi chica¡
    Me alegra que todo fuera bien, un beso grande princesa¡

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  2. Muchas gracias por el consejo, tengo lo mismo en el ojo y tendré que ir pronto a que me lo quiten . Me pondré mis mejores braguitas jijiji...
    Lo que no sabia yo , es que duele al quitarlo, a mi la doctora me dijo que no doliaaa!! :O
    Besos!!

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    1. Mi querida Paquita, todo era tensión, en realidad no duele nada, pero ya sabes que los nervios te traicionan.
      Así que respira pues imagina que te están desmaquillando el párpado, es lo que parece.
      Además corre sangre andaluza por mis venas, así que ya sabes que lo exagero todo.
      besos y gracias

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  3. Me ha encantado la frase "todo su glamour tirado por unas bragas". ¡Eres estupenda! Y mi madre diciéndome que tengo demasiada ropa interior! ¡No señoras! Hay que tener para cada ocasión... De hecho este verano en una boda terminé en la piscina y no quiero pensar la vergüenza que hubiese pasado llevando unas bragas "casi mostaza". ;) Un besazo!

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    1. Gracias por seguirme, por favor envía foto y la publicamos jajajaj
      besos

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